Además de la cantidad de especies de flora y fauna que habitan un ambiente determinado, el concepto de diversidad biológica incluye la red de relaciones que los seres vivos establecen en su territorio y con las condiciones ambientales que le rodean.
Durante las últimas décadas la sociedad ha ido tomando conciencia de que el ser humano no es ajeno al porvenir del planeta, mostrándose especialmente sensible ante la continua pérdida de hábitats naturales y el riesgo de extinción que sufren numerosas especies de flora y fauna. Se impone por tanto, para todos los sectores de la sociedad, el reto de seguir mejorando la calidad de vida de la población sin que ello suponga un deterioro de la diversidad biológica.
Es importante conservar los ecosistemas naturales dado que aportan al ser humano la totalidad de los recursos naturales que precisa el funcionamiento de su complejo entramado social y económico. El estudio realizado a nivel internacional conocido por “Evaluación de los Ecosistemas del Milenio” explica las consecuencias de los cambios en los ecosistemas para el bienestar humano ya que éstos nos proporcionan los bienes y servicios de los que depende la sociedad, los llamados servicios de los ecosistemas.
Se refiere a la variedad de genes dentro de una misma especie y que permite a las poblaciones enfrentarse a la selección natural, evolucionar y adaptarse a los cambios del medio que les rodea.
Es la acepción comúnmente asociada al concepto de biodiversidad y viene definido por la variedad de especies que se relacionan entre sí dentro de un mismo ecosistema.
Hace referencia a la variabilidad de ecosistemas que existen en el planeta y que en conjunto forman la biosfera.
Marco normativo
A nivel internacional la importancia de la biodiversidad se reconoció por primera vez en el Convenio de Biodiversidad Biológica (CDB). Este tratado fue firmado por más de 150 países en la Cumbre de la Tierra celebrada en Río de Janeiro en 1992. Años después se aprobó en Nagoya (Japón) el Plan Estratégico de la Diversidad Biológica 2011-2020, marco de acción de diez años para todos los países y las partes firmantes del Convenio para detener la pérdida de la diversidad biológica y asegurar sus beneficios para las personas.
A nivel europeo, los compromisos internacionales se reflejan en la Directiva de Hábitats (92/43/CE) y Directiva de Aves (2009/147/CE). Estas dos directivas son el origen de la RED NATURA 2000.
A nivel nacional, en 2007 se publica La Ley 42 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad. La experiencia adquirida durante los años de aplicación de esta ley puso de manifiesto la necesidad de mejorar ciertos aspectos de su aplicación, por lo que se modificó con este fin, especialmente en lo que se refiere a la gestión de los espacios protegidos. La Ley 33/2015 modifica algunos artículos e incorpora en nuestro ordenamiento jurídico los principales objetivos de la Estrategia de la Unión Europea sobre la biodiversidad hasta 2020.
La Red Natura surge ante la preocupación por parte de la Unión Europea por la detección de la pérdida de diversidad de especies (biodiversidad) en su territorio y la necesidad de proteger los recursos naturales de Europa.
Para solventarlo, decidió proteger esas especies y los lugares (hábitats) donde viven creando una red de espacios representativos de la diversidad de hábitats y de especies europeas. El conjunto de esos lugares constituye una Red Europea de Espacios Naturales que se denomina “Natura 2000”. Esta Red se considera la principal herramienta para contribuir a frenar la progresiva pérdida de biodiversidad en Europa.
La Red Natura 2000 se desarrolla a partir de la aplicación de dos directivas europeas: la Directiva de Aves y la Directiva Hábitats. Está constituida por las Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y las Zonas de Especial Conservación (ZEC) de cada Estado miembro de la Unión Europea, que previamente han sido declarados Lugares de Interés Comunitario (LIC).
Biodiversidad
Red Natura 2000
La Comisión Europea realiza actualizaciones periódicas de la lista Natura 2000 para recoger nuevos lugares o modificaciones de los ya designados a propuesta de las Comunidades Autónomas y los Estados Miembros. Si quieres conocer todos los espacios de la Red Natura 2000 consulta la cartografía oficial de la UE
Sabías qué…
No todos los LICs se convierten en ZECs. Únicamente pasarán a ser ZEC aquellos LICs oficiales para los que se apruebe un plan de conservación en un plazo máximo de 6 años desde su publicación en el Diario Oficial de las Comunidades Europeas.
Gestión de la Biodiversidad en EDP España
El Grupo EDP cuenta con una Política de Biodiversidad, con cuya implementación contribuye con el objetivo mundial de reducir la pérdida de biodiversidad debido a la actividad humana. En este sentido, la biodiversidad se considera una variable más que afecta a la toma de decisiones de todos los negocios y áreas geográficas en los que actuamos, de manera que se evalúan los posibles impactos y se definen las medidas operativas, preventivas y correctivas necesarias para su correcta eliminación, y cuando esto no es posible, su minimización y control.
Cómo ejemplos de actividades EDP España para la protección de la biodiversidad del entorno de las plantas de generación se firmaron dos protocolos de actuación ambiental con las asociaciones Kayak Oviedo y BTT Monte Areo. Dos proyectos que tienen la finalidad de promover actuaciones ambientales con agentes locales. Junto a Fapas, el club piragüista y EDP participan en la recuperación de especies autóctonas y la identificación de invasoras en el entorno del río Nalón, mientras que con la asociación deportiva ciclista colabora en la recuperación de ecosistemas en el entorno del monte Areo, junto a la central de Aboño, donde también se ha creado un circuito permanente para uso de bicicletas, senderismo y running.
Dado el elevado grado de protección ambiental desarrollado
en el Principado de Asturias, muchas de las centrales e instalaciones de
producción de EDP España se encuentran ubicadas en áreas naturales
protegidas, como es el caso de las Centrales Hidráulicas. Es así que en
todas ellas se dispone de Planes de Vigilancia Ambiental que garantizan
que se cumplen los requisitos ambientales aplicables, y en especial, las
licencias, permisos y autorizaciones existentes.
La Centrales Térmica y el Ciclo Combinado de Soto de
Ribera se encuentran en el entorno del río Nalón, en su tramo inferior
declarado Zona de Especial Conservación (ZEC), desde la presa de Soto de
Ribera hasta el puente de Navia, donde comienza la ría del Nalón.
Las Centrales no realizan trabajos o actuaciones que impacten
directamente sobre estos hábitats y especies, siendo el único impacto
indirecto identificable los vertidos de las plantas, principalmente el
vertido térmico, si bien se garantiza que se cumplen los requisitos
establecidos en las autorizaciones y se realiza el seguimiento continuo
de los mismos
En el caso de las actividades de Distribución, se
identifica como principal impacto sobre la biodiversidad el
mantenimiento de las calles de las líneas eléctricas y de los
gasoductos.
A este respecto se debe destacar que la evitación o minimización de
riesgos de incendios en líneas eléctricas existentes implica la
necesidad de realizar tareas periódicas de limpieza de las calles, lo
que supone la corta de arbolado bajo la línea, el control de árboles
limítrofes con riesgo de caída sobre la línea o de contacto con la
misma, así como tareas auxiliares que garanticen la transitabilidad de
la calle y la accesibilidad a las diferentes posiciones para su
seguimiento, control y mantenimiento reglamentario. El objeto último de
estas actuaciones es, en todo momento, garantizar el servicio y
minimizar los riesgos de incendio producidos por contacto. De este modo,
la repercusión de los trabajos sobre la biodiversidad, si bien podría
tener impactos negativos puntuales, debe entenderse en su conjunto como
positiva y necesaria. En el caso de los gasoductos, los impactos se
asocian a la fase de construcción, si bien luego también deben
mantenerse las trazas
La construcción de nuevas redes, si tuviera lugar, ya considera estos
aspectos en fase de proyecto, buscando minimizar la afección a hábitats
y especies sensibles. Además, EDP España mantiene la coordinación de
la vigilancia ambiental en las obras, tanto en distribución de gas
como transporte y distribución de electricidad.